domingo, 1 de noviembre de 2009

ESTADOS UNIDOS 7 - COLOMBIA 0


Después de una sistemática serie de derrotas y fracasos en el plano internacional, el gobierno colombiano acaba de anotarse su más grande victoria diplomática en los últimos 7 años. La aceptación total e irrestricta del acuerdo que le permite a los Estados Unidos instalar permanentemente a militares de su país en bases colombianas. El gobierno colombiano celebra este acuerdo destacando que los militares norteamericanos tendrán total impunidad, perdón, libertad de acción, ya que ante la comisión de cualquier delito ellos sólo responderán ante la justicia norteamericana en suelo norteamericano, tal como los dos asesores militares que violaron a una menor de edad en el Tolima hace tres años y cuya investigación se encuentra todavía en fase preliminar (continúan en su trabajo y están libres) en la certera e implacable justicia del norte.

Desde ahora los Estados Unidos podrán afianzar y profundizar su política antidrogas, la misma que ha sido un total fracaso, ya que en más de 15 años de continuo diseño, financiación y dirección de la misma, no han logrado que Colombia deje de ser el mayor productor mundial de cocaína, y que toda la cocaína del mundo se produzca en la región andina y que el mayor mercado de destino de la cocaína colombiana sean los Estados Unidos.

Otro de los puntos en los que Colombia se beneficia con dicho acuerdo, es que ante la clandestinidad del mismo, el gobierno colombiano no ha podido (y no podrá) garantizarle a ningún país vecino que desde dichas bases no se violará la soberanía de ningún Estado de la región, sin importarle las consecuencias comerciales (caso Venezuela), diplomáticas (Ecuador, Bolivia) y sociales de dicha decisión. Como se ha venido evidenciando en las últimas reuniones de la OEA y UNASUR, Colombia se aísla cada vez más de la región y se entrega con mayor pasión e intensidad a los designios estadounidenses.

Con la firma de este acuerdo deben estar temblando las FARC, que según el gobierno son las únicas causantes de los males habidos y por haber en Colombia, ellas son las causantes de la pobreza estructural del país, de la desigual acumulación de riqueza, de la corrupción sistémica, del olvido histórico del campo, de la vergonzosa acumulación de tierras productivas en poquísimas manos, de más de tres millones de desplazados internos, de 25.000 desaparecidos forzados, del renacer paramilitar, del narcotráfico, del tener del desempleo más alto de la región, de no clasificar al mundial de fútbol, de que no llueva y recientemente se investiga su participación en la explicites sexual de los videos de Shakira. Con la llegada de más militares norteamericanos (ya hay 1400 en suelo colombiano), todas estas situaciones deben desaparecer y el gobierno no tendrá que verse obligado (una hecatombe) a volver a estigmatizar a la oposición, no tendrá que utilizar a la policía secreta del Estado para espiar a los magistrados de la Corte Suprema de Justicia, a los periodistas y políticos opositores ni a los sindicalistas y defensores de Derechos Humanos, ya no volverá a apoyar sus lineamientos estratégicos en políticos que tienen estrechos vínculos con el narcotráfico y el paramilitarismo , no volverá a quitarle recursos a los campesinos pobres (Carimagua, Agro Ingreso Seguro) para dárselo a los grandes ganaderos y agroindustriales que apoyaron su elección y posterior reelección, no tendrá que volver a utilizar el servicio diplomático como asilo de delincuentes, los militares ya no tendrán que asesinar civiles y hacerlos pasar como guerrilleros muertos en combate (2.000 falsos positivos investigados por la fiscalía) por la presión de entregar resultados en la lucha contrainsurgente para que los Estados Unidos sigan financiándola, ahora los hijos del presidente no utilizarán las influencias que su situación de hijos del presidente les otorga para hacer negocios pocos éticos y enriquecerse desmedidamente.

Con la firma de este acuerdo los colombianos seremos completamente felices porque esta firma representa el fin del narcotráfico (¿qué pasará con la DEA y todas las agencias antinarcóticos de los Estados Unidos?) y el terrorismo de izquierda, el de derecha no es tan malo, hay que recordar que ese suple al Estado en su ausencia y sólo persigue fines nobles y altruistas (defender la propiedad privada, el catolicismo y el libre mercado, pilares de la civilización occidental) que son los mismos de la gran mayoría de los colombianos de bien, los que gracias a la seguridad democrática han podido volver a sus fincas y haciendas, han podido retomar sus actividades en el campo, volver a la ganadería, a sus humildes cultivos de palma africana.

No hay comentarios: